La molienda. Las tablillas de chocolate y los talleres de Fundación Herdez

Mi molienda

Justo cuando estaba por iniciar en el metate (en el Taller de tablillas de chocolate impartido por Fundación Herdez, existía la posibilidad de hacer la tarea parcial o total en molino de mano) la molienda de los ingredientes para mis tablillas de chocolate sonó el caracol anunciando las actividades del día en la ahora plaza de danzantes al lado del Templo Mayor.

Y no exagero. No fue ni antes ni después. Fue el momento exacto. Justo en el primer toque del huilanche en el metate sonó el caracol. De la nada y en perfecta sincronía toque de caracol y piedra del metate.

¿Coincidencias? nahhh prefiero tomarlo como señal clara de muchas cosas, entre ellas la maravillosa identidad de ser mexicano.

Con esa belleza de sincronía entre el caracol y el metate empecé mi labor. No había más que decir y sí mucho que hacer.

Cacao y canela antes del tostado. Ya seleccionados

La molienda se hizo en el metate. A golpe de lomo. Los ingredientes estaban ya listos: cacao seleccionado, canela integrada, ambos ya tostados y en el caso del cacao sin cascara. Durante el proceso le añadí un poco de chile y el azúcar (también a gusto de cada quién). La bondad de la receta es que prácticamente puedes preparar tu barrita de chocolate de la manera que quieras. Yo escogí chile y amaranto. 

Disfruté muchísimo la molienda. Sí. Pero el taller es lindo desde el inicio. De recepción bebida de cacao: fría o caliente. Polvorón incluído. 

Después de ese pequeño entremés; la charla introductoria con los pasos a seguir en la preparación del chocolate.

Tostando el cacao y la canela

Paso a paso todo el proceso y de la mano de la Chef Montserrat Castillejo Pichardo y sus dos asistentes. Cualquier duda o sugerencia de parte de los asistentes al taller sería atendida de inmediato. 

Al terminar de integrar todos los ingredientes era finalmente necesario darle forma a la pasta obtenida.

Y que le agrego chile

Mis escasas aptitudes artísticas acertaron sólo a formar bolitas de chocolate. No las más bonitas pero si muy sabrositas. Me divertí y quedé encantado con el taller. La molienda quedó grabada en mí de manera muy especial. Te permite entender muchas cosas: el trabajo que implica que cualquier alimento llegue a tu mesa, el contacto con los ingredientes, su transformación y su posterior consumo. 

Azúcar al gusto

 

Y mi chocolate está listo =)

 

Chulada de taller. 

Fundación Herdez regularmente ofrece este y otros talleres al público en general. 

Sólo es cuestión de estar atentos para  checar su programación.