Champagne Louis Roederer, una bodega con certificación de viticultura sostenible

Champagne Louis Roederer, una bodega con certificación de viticultura sostenible

Champagne Louis Roederer, una de las casas de champagne más distinguidas del mundo, cuenta desde julio de 2016 con las más altas certificaciones de viticultura sostenible, gracias a sus procesos y aportaciones al medio ambiente desde sus viñedos en Reims, Francia

Desde 2014, la bodega creadora de uno de los champagnes más prestigiados del mundo, se dedicó arduamente a obtener las certificaciones de CIVC (Asociación Oficial de Comercio de Champagne), y la HVE, sinónimo de alto valor ambiental a cargo del Ministerio de Agricultura de Francia.

Este enfoque fue una manera de confirmar todos los esfuerzos realizados por la bodega desde los últimos 15 años en ámbito ambiental a través de trabajos de viticultura: cobertura, el paisajismo, la longitud de las filas y las franjas de protección en la hierba, además de la medición de todo para que se corresponda para establecer las proporciones ideales.

El minucioso cuidado que la bodega Louis Roederer le da a la vid conlleva procesos de agricultura biodinámica en los que en el 98% de la zona se utilizan productos provenientes de la tierra misma, en lugar de sintéticos, por lo que sus cosechas son orgánicas. Esta nueva visión hacia el “Champagne del Futuro” da mejores frutos, gracias también a los climas ópticos de Reims.

Además de poseer sus propios viñedos con más de 240 hectáreas, la misma bodega crea sus vinos de base, que junto con las mejores uvas y largos procesos de producción artesanales, dan como resultado un “Champagne de Propiedad” completo, moderno sin dejar de ser un gran clásico de prestigio mundial.

La preservación de biodiversidad y el buen desempeño ambiental son tan solo algunas de las prioridades para la casa de champagne Louis Roederer, para lograr ambas certificaciones que confirman una vez más su excelencia y compromiso ambiental.

En julio de 2015 los viñedos de Champagne fueron nombrados Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, gracias a la belleza de sus colinas y sus paisajes.